SIEMPRE HACIA ADELANTE y cómo se es lo que se escucha

Siempre es un momento importante para un coleccionista cuando cae en sus manos una colección completa, pero el día de ayer para mí fue un día agridulce y es que la colección que os voy a enseñar era de mi tío Rober.

Además creo que «se es lo que se escucha»  y que una buena forma de conocer a alguien es rebuscar entre sus discos y charlar cerveza en mano sobre gustos musicales.

Así que para mí este era mi tío.

De pequeño me encantaba ir a casa del tío Rober. Siempre había buena música puesta. Música que para un niño que todavía no sabía nada sobre Blues o sobre Jazz era «esas cosas raras que escucha mi tío».

Yo me he criado entre los discos de mi padre de John Mayal, la Creedence y los Beatles. Con mi madre descubrí a Kraftwerk y a Pink Floyd, pero el Blues americano, el Jazz de club neoyorkino  y los grupos de Soul no tan conocidos vivían en el salón de mi tío.

Mi tío Rober en la vida se dedicaba a conseguir cosas. Cuando internet estaba en pañales y nadie sabía lo que es «un buscador» el tenía un anuncio en el periódico que rezaba: «Se consigue cualquier cosa»y joder que si lo hacía, por lo que no me ha sorprendido que dentro de la colección apareciesen discos tan variopintos como un Prestige de Coltrane o varios discos alemanes de los Stones.

Tenía móviles cuando en las casas no había mas que teléfonos de baquelita, agendas electrónicas cuando en las oficinas no había mas que Olivettis y singles de los Beatles cuando en España se escuchaba Rafael.

El fin de semana se compraba todos los periódicos y podría haber escrito un libro sobre el arte de hacer Té.

Mi hija no  ha llegado a conocerle pero siempre sabrá quién era «el tio Rober» cuando en casa suenen cosas como  Grover Washington o Vanilla Fudge.

y me dio el mejor consejo que le puede dar alguien que se va a alguien que está atascado: «tú Iñigo siempre hacia adelante» y en eso estamos tio, en eso estamos.